Jesús les dijo: “Los reyes de los gentiles se enseñorean de ellos; y los que tienen autoridad sobre ellos son llamados bienhechores. Pero no es así con vosotros; antes, el mayor entre vosotros hágase como el menor, y el que dirige como el que sirve”, Lucas 22- 25- 26.
Jesús puso el modelo perfecto que deben copiar todos sus seguidores genuinos. La vida de ellos, como la de él, se debe distinguir por prestar servicio y por el espíritu de dar.
Cuando estuvo en la Tierra, el Hijo de Dios dijo que había venido, no “para ser servido, sino para servir, y para dar su vida en rescate por muchos. (”Mateo 20- 28), Versión Moderna) Su vida está en fuerte contraste con la actitud egoísta, ambiciosa, de tantas personas de hoy día a quienes no les preocupan las necesidades de otros, solo su felicidad” bienestar, tranquilidad, comodidad y autorrealización. Aunque alrededor pasen muchas cosas, parecen no afectarle, e importarle.
La palabra que se traduce “servir” y que usó el escritor bíblico Mateo cuando citó a Jesús, nos interesa. En el griego original es el verbo diakoneo. Hay otros verbos griegos que se refieren a prestar servicio y cada uno tiene su propio “sabor” o énfasis en cierto aspecto del servicio que se presta. Un verbo pudiera dar énfasis a la sujeción que tiene que ver con servir de esclavo (douleúo; col 3 24), otro, a la santidad del servicio religioso (latreúo;Mat 4- 10), y otro, a la naturaleza pública del servicio prestado (leitourgeo; hechos 13- 2). Diakoneo, por otra parte, da énfasis a la mismísima naturaleza personal del servicio que se presta a otra persona. Como dice una autoridad, en este verbo hay “más fuerte aproximación al concepto de un servicio por amor.”—Theological Dictionary of the New Testament, tomo II, página 81.
Un uso primitivo de la palabra se refiere a ‘servir a las mesas.’ Lucas lo usa así al citar las palabras de Jesús en cuanto a que un esclavo ‘aderezó la cena de su amo y luego le sirvió [diakoneo] hasta que hubo comido.’ (Lucas 17- 7-10)(Lucas 25- 35-38 ) Jesús dio a sus discípulos una ilustración en la que el amo, que representaba a Jesús mismo, cambió papeles con sus esclavos que habían esperado fielmente que llegara de su banquete de bodas. Jesús dijo esto del amo de la ilustración: “Él mismo se ceñirá, y haciendo que ellos se sienten a la mesa, se llegará y les servirá [diakoneo].” no solo el ‘servir a las mesas,’ sino todos los servicios de una naturaleza personal similar llegaron a estar abarcados por ese término. La Biblia dice que “de sus bienes” ciertas cristianas “ayudaban” o “servían” a Jesús y sus apóstoles según éstos lo necesitaban, tanto en Galilea como en Jerusalén. (Lucas 8- 1-3mateo27-55;Marco 15-41; NM; Versión Popular) Es posible que hicieran las compras y prepararan los alimentos, remendaran y lavaran la ropa, curaran las heridas físicas, espirituales o prestaran otros servicios de naturaleza similar, y hasta utilizaran su propio dinero y posesiones para proporcionar los materiales que se necesitaran. No está restringido simplemente a actividad “religiosa,” sino que abarca una amplia variedad de servicio, es en forma integral.
CONTRASTE DEL SERVICIO:
En una parábola que dio hacia el fin de su servicio terrestre, Jesús describió el juicio que pronunciaría con relación a dos clases de personas, una clase asemejada a “ovejas,” La otra a “cabras.” Las “ovejas,” que fueron aprobadas y bendecidas, vinieron a asistir o ayudar a los hermanos de Cristo cuando los vieron necesitados. Pero las “cabras,” que fueron condenadas, vieron a éstos con hambre y sed, con necesidad de hospitalidad o albergue, carentes de ropa o enfermos o en prisión y ‘no los asistieron diakoneo; no les ‘sirvieron,’ NM].’—Mateo 25- 31-46, Biblia de Jerusalén.
Los verdaderos discípulos de Jesús durante el primer siglo E.C. demostraron que eran “semejantes a ovejas” en actitud y acción. Cuando los cristianos de Macedonia y Acaya se enteraron de que sus hermanos de Judea estaban necesitados, reunieron provisiones de socorro y se las enviaron a éstos, ejecutando una “ministración de socorro diakonía Más tarde Pablo mismo recibió ayuda refrescante de hombres como Onesíforo y Onésimo a medida que éstos le ‘sirvieron’ y ‘lo ayudaron’ (diakoneo) en tiempos de prueba. (2 Timoteo 16-18 Filemón 10-13, Cuando escribió a los corintios, les mostró los excelentes resultados que produce ese servicio bondadoso, altruista, para alabanza de Dios y el adelanto de las buenas nuevas. Del “socorro” diakonía; “servicio,” NC; “ministerio,” NM) para los hermanos de Judea, dijo: “Con esto quedaréis ricos de todo y aptos para una copiosa largueza. La cual distribuida por nosotros producirá rendimiento de gracias a Dios. Porque el ministerio de este servicio sagrado no sólo satisface la penuria de los santos, sino que también es copiosa fuente de múltiples acciones de gracias a Dios. Los que reciben con este socorro la prueba de vuestra caridad, glorifican a Dios por vuestra profesión de obediencia al evangelio de Cristo, y por vuestra liberalidad en beneficiarles a ellos y a todos.
UN SERVICIO ETERNO Y SUBLIME:
De lo que hemos considerado hasta el momento se hace patente que el atender las necesidades físicas y materiales de otros, en particular de nuestros hermanos cristianos, es una parte vital del servir cristiano. Ninguno de nosotros debe considerar jamás como “indigno” de nosotros el servir humildemente de estas maneras, o subestimar la importancia de tal servir a los ojos de Dios. Y sin embargo, hay un aspecto de servicio aún más vital que los cristianos genuinos estarán muy interesados en prestar. ¿Cuál es? Es el servir a otros lo que necesitan en sentido directamente espiritual. (Hechos 6-1-4) No hay mayor tarea, profesión que la de ser Siervo de Dios Altísimo y la de enseñar, Servir para la transformación de las almas, de las vidas. Que labor tan Gloriosa. Del Amor derramado en nuestros corazones reflejado y encarnado en el servicio.
Todos los que servían de “ancianos” eran también servidores o siervos de sus hermanos, incluso de los llamados “siervos” de la congregación (“siervos ministeriales,” NM). Jesucristo mismo había venido, ‘no para que se le sirviera, sino para servir.’ El inspirado apóstol Pablo declaró que Jesús “ha sido hecho servidor diákonos de la circuncisión en favor de la verdad de Dios. Fuera parte de un cuerpo de siervos de congregación (“siervos ministeriales” o “diáconos”) en una congregación en particular, sino, más bien, que había sido asignado para servir a favor de la congregación cristiana en conjunto. Hablando de esa congregación, él dice: “He llegado a ser uno de los que sirven diákonos; ministro, a la iglesia, por el encargo que Dios me dio para el bien de ustedes, de dar en forma completa el mensaje de Dios.”
NOTAS:
El término diákonos provienen de la palabra griega día, que significa “a través de,” y la palabra griega konis, que significa “polvo,” y por consiguiente describe a un siervo que está cubierto de polvo debido a haber ejecutado algún deber o mandato para su amo.
¡A MANERA DE CIERRE CARACTERÍSTICAS DE UN SIERVO PIADOSO!
UN LÍDER SIERVO BUSCA LA GLORIA DE SU AMO.
BUSCA SACRIFICIALMENTE EL MAYOR GOZO DE AQUELLOS A QUIENES SIRVE.
RENUNCIARÁ A SUS DERECHOS EN LUGAR DE OSCURECER EL EVANGELIO.
NO ESTÁ PREOCUPADO POR TENER VISIBILIDAD O RECONOCIMIENTO PERSONAL.
SE ANTICIPA Y GENTILMENTE ACEPTA EL MOMENTO DE SU DESCENSO.
En lo personal considero que Todos queremos ser servidos. Pero JESÚS nos enseña… requiere de nosotros aprender a servir si queremos bendecir a otros.
Señor, ayúdame a estar dispuesto a servir».
El amor de Dios por nosotros nos da poder para servir a los demás.
Autor: William Arturo Castañeda Suarez. Bogotá Mayo 2019